LA ACEQUIA DE BENIAJÁN A SU PASO POR SANTO ÁNGEL
Desde el Taller sobre «Recuperación de la historia y la memoria de Santo Ángel» también nos interesamos por el patrimonio material e inmaterial vinculado a nuestra huerta, del que destaca el trazado de la red de riego tradicional en la pedanía. Uno de sus cauces más relevantes es la Acequia de Beniaján, que con sus más de 18 kilómetros, es una de las de mayor recorrido del municipio de Murcia. Esta acequia toma sus aguas de la Acequia Mayor Alquibla en las inmediaciones de San Ginés, atraviesa Aljucer y el Reguerón, y recorre la pedanías de la Costera Sur al pie de la sierra, desde La Alberca hasta Zeneta. En 1474 se firma el acta fundacional del Heredamiento de Beniaján, cuyas ordenanzas han regulado desde entonces la distribución del agua para riego.
En Santo Ángel el trazado de esta acequia cuenta con unos 900 m: entra desde La Alberca cruzando la carretera de Santa Catalina (junto a El Charco), circula por el límite norte del núcleo urbano y, tras atravesar la carretera de La Fuensanta, continúa viaje hacia Algezares (visor de la Red de Riego Tradicional de la Huerta de Murcia – http://iderm.imida.es/Acequias/)
Tras estas pequeñas «investigaciones», a principios de marzo realizamos una salida de campo para reconocer sobre el terreno el trazado de la Acequia de Beniaján a su paso por Santo Ángel, así como el estado del cauce, su entorno y los elementos asociados. En nuestro recorrido pudimos constatar que la mayor parte de la acequia se encuentra actualmente soterrada, y en mucho tramos invadida o sepultada por construcciones recientes, aunque aún persisten algunos partidores, tablachos y portillos como testigos mudos de su silenciosa presencia. La acequia, tan viva y vital en otros tiempos, transcurre hoy por un entorno desnaturalizado y marcado por el abandono, sin huertos cercanos que regar, y casi olvidada por la mayoría del vecindario.
Nuestras observaciones han quedado registradas en una breve «crónica», en la que también planteamos la oportunidad de aprovechar los planes urbanísticos a desarrollar en la zona para rescatar del olvido el trazado de la acequia, su historia y su memoria, a través del acondicionamiento de un sendero que permita integrar, preservar y re-descubrir tanto la organización y el funcionamiento del sistema de riego, como su significación cultural, socioeconómica y ambiental.
Así, acordamos remitir al alcalde/presidente de la Junta Municipal los resultados de esta actividad del taller, con la esperanza de que puedan ser considerados en futuros proyectos patrimoniales a desarrollar en la pedanía.
También queremos animar al pueblo de Santo Ángel a recorrer, disfrutar y rescatar del olvido sus acequias y azarbes.